Crítica de Cuerpos especiales (The Heat)
Amigos: parodia de polis, protagonizada por Sandra Bullock otra vez a lo Agente Especial (sin Miss) y susceptible de recibir un título español como Cuerpos especiales, categoría humorística «mira tronco qué risa con todo el chistaco de gordos». A priori simple y atávico terror. Ah, pero no nos precipitemos porque la vida se ve muy diferente cuando Paul Feig es quien orquesta una película y lo hace recurriendo a su toque freak y con sus habituales amigos de clase: el otro 50% de este dúo de buddies es Melissa McCarthy y todo está escrito por Katie Dippold, aplicada alumna de la escuela MAD TV con postgrado en Parks and Recreation. En un giro de los acontecimientos y a golpe de talento lo que debería haber servido como merienda de Razzies en forma de comedia inane para plateas con nivel de exigencia cinematográfica cero termina convertido en algo con cara y ojos. Una comedia de polis con más de lo primero que de lo segundo que funciona como dignísimo y cuasitronchante matatiempo cómplice. Una cosa algo gilipóllica, pero decididamente entretenida, a ratos hasta brillante. Y mucha boquilla, pero al final a mí hasta me hace gracia la Bullock cómica.
Aunque en el fondo es McCarthy la que se mete al público en el bolsillo. Y recordemos que los bolsillos de esta señora tienen que dar de si. Ella interpreta al «mala» en la fórmula «poli buena / poli mala», una agente especial bruta y gorrinil con métodos de sutileza cercana a un Caterpillar de siete ejes. Choque frontal con su nueva compañera, la tipa académica remilgada y ortodoxa que vive con su gato viendo TiVo y se refiere a la «F word» como «the F word«. Química por contraposición, pues. Ha funcionado siempre y lo seguirá haciendo, por lo menos mientras esté tan bien ejecutado a todos los niveles como lo está a aquí. Algo que nos retrotrae (otra vez) a los dichosos 80 y sus comedias de acción con estética de smiley del acid house. Cuerpos especiales dice no a Vaya par de polis y afina mejor su propuesta homenajística simplemente siendo más cachonda y más directa que la de Smith y, de paso, menos ofensiva hacia Arma letal, Colegas a la fuerza, Superdetective en Hollywood o lo que se tercie. Y por el camino actualiza todo aquello con una idiosincrasia humorística apegada a los postulados de la comedia contemporánea americana: la frontalidad de las chanzas y la incorrección sucia de los chistes de McCarthy pueden recordar al mejor Todd Phillips, si es que ese personaje sigue existiendo, o a David Gordon Green cuando no había vuelto al cine hipster con zapatilla de felpa.
Y es que la actriz de Bridesmaids -vuelvo a la McCarthy- demuestra de nuevo que cuando quiere le basta con poner un poco de su whitetrashismo para alegrar cualquier comedia bruta. Pero también que puede adaptarse como un guante a las circunstancias para construir una peli de dos movida principalmente por una química arrolladora: Bullock da la talla y demuestra, y ya digo que no es la primera vez, una buena afinación cómica entre la sofisticación y el desparpajo. Cuerpos especiales no es mucho más buena que sus compañeras de promoción -volvamos a recordar Vaya par de polis-, pero sí bastante más divertida. E innegablemente desparpajada en su guión, enfocado a la comedia, aunque un poco negligente hacia lo policíaco: como otros casos recientes de la misma cuerda cómica y homenajística -se me viene a la cabeza la aún novata serie Brooklyn Nine Nine– aquí prima más la desmitificación de los cuerpos de seguridad y el acercamiento de sus rutinas diarias a una esfera más cotidiana que las construcciones de tramas criminales complejas. En este sentido, el argumento aparece endeble y desdibujado, sujeto a las correrías de nuestra pareja, versión femenina del dúo que protagonizaba Los otros dos.
Poco interés al respecto, pero más o menos la misma cantidad que aportan los responsables, menos centrados en eso y más en desarrollar una comedia bulldozer ultraeficaz en timing y diálogos pero ausente en criterios de dirección. Feig suele funcionar en todos sus productos como catalizador de una nube de nombres que orbitan alrededor de su figura, pero poco como maestro de ceremonias con un estilo de realización personal o una capacidad narrativa especialmente potente. Eso cierra puertas a la película hacia cotas cinematográficas más respetables y elevadas e impide que sea una cinta en líneas generales netamente notable. Pero no quita que sea un producto eficaz, fuerte y más listo que el hambre en el terreno en el que se pretende mover. Podría decirlo de otra forma, pero me apetece esta: Cuerpos especiales mola bastante, entretiene ricamente y ofrece descojone a porrillo. Así que no voy a ser yo el listo que le quite méritos.
7/10
hmmm… ajá, sí… vale… ajá. Entiendo que la película valga la pena, gracias por la recomendación! Pero me desconcierta lo de "La novia de mi mejor amiga" del póster. ¿Es una referencia a la homosexualidad de las protagonistas? xD
No, es una referencia a andar cambiando los títulos de las películas alegremente (como el de "Bridesmaids") y luego no tener ni puta idea de cómo era que la habían llamado.
Bravo, señores de las traducciones, bra-vou!