Crítica de Deadly Class (Primera temporada)
Mucho ha llovido desde que el canal Syfy se convirtiese en el lugar de referencia a la hora de buscar series de ciencia ficción o fantasía. La parrilla del canal privado sufrió un recorte presupuestario que le obligó apostar por sub-productos mucho más humildes. La repercusión y el riesgo eran menores. Al menos hasta la llegada de Deadly Class.
Los hermanos Russo se apartan de Los Vengadores y del sello Marvel para producir la adaptación a televisión de los cómics creados por Rick Remember y Wesley Craig. En Deadly Class nos plantamos en unos sucios y empantanados años 80, en la ciudad de San Francisco. Allí, un grupo de jóvenes asesinos perfeccionan sus letales habilidades en una escuela exclusiva para la peor escoria posible. Nuestro protagonista es Marcus, un huérfano que malvive en la indigencia, esperando la oportunidad de vengar moralmente a sus padres con un objetivo claro: asesinar a Ronald Reagan.
Tanto la serie como el cómic desprenden una nostalgia por la música, los cómics y el espíritu punk de unos años 80. Los diálogos por momentos son un batallón de referencias en boca de personajes arquetipos que, en el traslado a pantalla, ganan en humanidad. Uno de los principales aciertos es el cast de jóvenes talentos. Si bien ninguno de los intérpretes despunta como un portento actoral, todos consiguen hacerse con la esencia de sus personajes y, de esta forma, hacer creíbles giros imposibles. Y es que Deadly Class es una serie recargada desde su concepción.
A lo largo de sus 10 episodios la serie se mantiene bastante fiel a la línea de los primeros tomos del cómic. Los puntos fuertes se mantienen intactos (el delirante viaje a Las Vegas, la complicada representación de María o la trama de Fuckface) pero al mismo tiempo se permite licencias para amoldar personajes y tramas a su propio universo televisivo. Se nota el cariño con el material original hasta el punto de apostar por segmentos de animación sacados directamente de las páginas del cómic.
Como se nota también un esfuerzo por hacer las cosas bien y apostar por algo grande. En el camino no funcionarán todos sus ingredientes, pero se agradece el esfuerzo de adaptar un material tan arriesgado. Esperemos que su tímida audiencia crezca enteros a su paso por plataformas VOD, y consiga firmar una segunda temporada que se promete muy apetecible. Si algo se puede decir de Deadly Class es que ha entendido la importancia de despedirse con un bang. Literalmente.
Trailer de Deadly Class
https://www.youtube.com/watch?v=iZyc7Q5ESmI
Valoración de La Casa
En pocas palabras
Una gran adaptación que mantiene bastante de la esencia punk del cómic, pero sabe cuándo aligerarse y no espantar a su nuevo público. Acción, drama adolescente y personajes carismáticos.