Crítica de Dewey Cox: Una Vida Larga y Dura
Esa identidad se encuentra principalmente en el guión. Y es que Judd Apatow y Jake Kasdan (éste también director de la película) parecen haber tomado como ejemplo precisamente las comedias protagonizadas por Charlie Sheen y Leslie Nielsen, olvidándose por completo de la nueva parodia, capitaneada por «Scary Movie». A diferencia de esta última, «Dewey Cox» tiene una historia propia, que si bien recoge (evidentemente) muchos de los lugares comunes de los biopics musicales para reírse de ellos, consigue hacerse con una línea de humor constante y con entidad, que en numerosas ocasiones se olvida y hace olvidar al espectador de que sigue tratándose de una parodia.
Humor que, por cierto, no es apto para todos los públicos, ni mucho menos. Apatow y Kasdan arremeten contra todo, y no dudan en hacer mofa de los excesos, las sobredosis, el sexo e incluso el fratricidio. Y todo ello plasmado en pantalla también de manera excesiva. No es de extrañar que su andadura comercial por los cines americanos haya sido tan poco brillante, ya que debido a ciertas escenas que incluyen escenas sexuales explícitas y desnudos integrales, «Walk Hard» ha sido calificada como «R», que significa que los menores solo pueden verla si van acompañados (ya se sabe lo alarmistas que son por esos lares). La verdad es que dicha peculiaridad queda lejos de ser un escollo, y supone un desconcertante pero desternillante soplo de aire fresco o, por lo menos, atípico.
Pero al margen de todo ello, el mérito de «Dewey Cox» es que es la mar de divertida. Una vez más el nuevo enfant terrible de Hollywood (y compañía) demuestra ser un verdadero genio a la hora de construir situaciones hilarantes y personajes de lo más alocados, así como historias que partiendo de los más disparatados acontecimientos poco a poco acaban por ser positivos y alegres mensajes edulcorados pero nada molestos debido a la habilidad con la que son maquillados.
Una baza muy importante con la que también cuenta «Dewey Cox» para agradar al público es su cartel de actores. John C. Reilly ya demostró ser un válido cómico en «Pasado de Vueltas», pero aquí está simplemente pletórico. Interpretando al cantante protagonista en todo momento desde sus 14 años (!) hasta los más de 70, un camaleónico Reilly consigue divertir como pocos pese a su desangelado rostro, y se consolida como una alternativa más que válida al todopoderoso Will Ferrell (protagonista y guionista de precisamente «Pasado de Vueltas», que producía, qué coincidencia, Apatow Porductions). Le acompaña una Jenna Fischer tan encantadora como siempre, que poco a poco va expandiendo sus fronteras, más allá de la serie «The Office».
Pero como viene siendo habitual, gran parte de la gracia consiste en ir reconociendo a los numerosos actores (coleguillas todos ellos) que van desfilando por la pantalla en forma de apariciones puntuales o cameos desacreditados, cosa ya habitual en las películas con el sello Apatow. Ya que no pretendo arruinaros demasiado la sorpresa, me limitaré a aconsejar que os fijéis en los rostros de Los Beatles, no tiene desperdicio.
Mención aparte merece la banda sonora, compuesta por canciones escritas por los mismos creadores de la película, incluido el actor protagonista, que demuestra una vez más el cariño y esfuerzo que se ha puesto en la película.
Sin embargo, hay algo que sí cabe reprochársele, y es lo mismo que hacía mella en las anteriores películas con Judd Apatow como guionista: una duración excesiva se mire por donde se mire. Si una comedia dura casi dos horas, no puede permitirse el lujo de bajar el ritmo en ningún momento, y lamentablemente en «Dewey Cox» ese descenso se hace palpable, sobretodo antes de entrar en el clímax final. Durante esos (varios) minutos, da la sensación de que la trama no evolucione, y se empiezan a repetir situaciones que acaban siendo algo cansinas. Aunque afortunadamente la cosa no resulta demasiado molesta (es un simple parón que no empaña demasiado el resto de la película), a nadie se le escapa que bien podría haberse evitado en la sala de montaje.
En resumen pues, «Dewey Cox: Una Vida Larga y Dura» es muy buena comedia que no llega al nivel de «Supersalidos», «Lío Embarazoso» o «Virgen a los 40» debido a la irregularidad de alguno de sus tramos, pero se confirma como una gran parodia hecha con mimo y dotada de un humor tan mordaz como adictivo. Desternillante, atípica, y muy, muy aconsejable.
7/10
Buscando Dewey Cox: Una vida larga y dura en vk server llegué hasta aquí, quiero verla pero no la encuentro por ninguna parte, ¿conoces al menos algún videoclub online donde pueda verla? Gracias de antemano
online no hace falta, la tienes offline tanto en videclubes como en tiendas. De nada de postmano!
Sin querer me he topado con esta película en el canal TBS y me he divertido a lo grande, la acabo de ver hace poco rato, al principio me pareció algo ilógica la actuación de Relly interpretando a un adolescente pero luego me he reído como hace tiempo no lo hacía. Comedia fresca e inteligente. Saludos.
Terminando de ver la pelicula, me agrado muchísimo…