Crítica de Feliz día de tu muerte 2
Uno siempre está buscando al nuevo enfant terrible del terror, ya sea en su vertiente de jumpscares, en cuanto al horror clásico o mezclado con comedia, como es el caso de Christopher Landon, director de la estupenda Zombie Camp, la refrescante Feliz día de tu muerte o una de las entregas menos interesantes pero que sí buscaba un camino original de Paranormal Activity: Los señalados, al trasladar la historia a un humilde barrio latino. Y parece ser que habrá que seguir buscando, al menos si nos ceñimos en exclusiva a esta secuela, que de tan loca que intenta ser, acaba saturando.
Si bien la película original resultaba simpática y se dejaba querer, pese a un argumento prestado de Atrapado en el tiempo y unos sustos muy en la línea de la saga Scream, esta segunda parte no tiene ni pies ni cabeza y apuesta por dar explicaciones pseudo-científicas, con el objetivo de expandir su universo y presentar un argumento coherente, que a todas luces no lo es, ni lo necesita.
En este caso, la construcción de una máquina por parte de los cerebritos de la Universidad parece ser la culpable de los viajes en el tiempo que hacen que la protagonista reviva el día de su asesinato una y otra vez. Dicho aparato del demonio ha generado el multiverso, de forma que estamos ante una realidad distinta a la ya conocida en el filme original. Así, la protagonista tendrá que encontrar a su nuevo asesino y buscar la forma de que la ciencia la devuelva a su correspondiente realidad.
Con unos chistes que a veces rayan el absurdo, algunos momentos tope dramáticos y ciertas escenas que parecen sacadas de Deadpool al romper la cuarta pared, el batiburrillo se indigesta, aunque ocurre igual que con un batido del Five Guys de vainilla con trocitos de bacon, que finalmente nos lo acabamos y se disfruta si uno se deja llevar, aunque sus arterias queden seriamente dañadas. Mejor no pensar en la locura argumental de la película, lo poco aprovechados que están algunos personajes secundarios, las pocas concesiones al terror o el comienzo con un personaje «doble», que no se vuelve a tratar, provocando el sonrojo del respetable.
Pero bueno, unas risas te echas, y parece que esto promete saga. Si tira por el sendero de la locura y del todo vale, que lo tengan en cuenta y no mezclen con partes serias. En ese caso, tendrán mis dieses. Por el momento, la segunda parte pinta más a fracaso y nos recuerda los buenos momentos del día de la marmota asesina anterior.
Trailer de Feliz día de tu muerte 2
Valoración de La Casa
En pocas palabras
Innecesaria segunda parte de una broma que tuvo su gracia y ya. Feliz día de tu muerte 2 lo intenta, pero no acaba de dar en la diana por su innecesaria contención.