Crítica de El gurú del buen rollo
Desde que abandonara (al menos temporalmente) su papel como Austin Powers, más bien poco se ha sabido de Mike Myers, cuya última aparición en pantalla grande se saldó con aceptables resultados (estadounidenses) en cuanto a audiencia pero lamentables en cuanto a crítica. Consciente de la necesidad de un nuevo éxito, ahora prueba suerte con El gurú del buen rollo, película de la que firma (junto al desconocido Graham Gordy) el guión y para la que se reserva el papel protagonista. En esta ocasión interpreta a Pitka, un estadounidense que fue educado por gurús fuera de su país y que ahora vuelve con la misión de reunir a un jugador de hockey (Romany Malco) con su mujer (Meagan Good), que lo ha dejado por un atleta rival, Jacques Grande (a quien interpreta Justin Timberlake), ya que es la única manera de que este vuelva a centrarse en su juego y conduzca al equipo de los Leafs, dirigido por Jane (Jessica Alba), a la victoria.
Por muy apasionado de la comedia que pueda ser (que lo soy), nunca me ha caído demasiado bien el agente Powers, y de hecho, considero tanto a la trilogía como al propio actor terriblemente sobrevalorados. Digo esto porque tal vez (aunque sea de manera subconsciente), esa percepción me haya influido a la hora de ver The Love Guru, ópera prima de Marco Schnabel, por cierto. El caso es que la he encontrado una de las comedias más desafortunadas de los últimos años.La nueva propuesta de Myers es un desagradable y anticuado ejercicio de ¿humor? en que se dan cita un sinfín de chistes de dudoso gusto, en su mayoría centrados en el tamaño del miembro de uno, las erecciones del otro, el cubo de orina del de más allá, o la adicción a las drogas de aquél. Pero así como en otros ejemplos (como la reciente y muy divertida Dos colgaos muy fumaos. Fuga de Guantánamo), los mismos temas son tratados con decencia y voluntad de simplemente hacer reír al espectador, en la que nos ocupa parece que simplemente se busque la repugnancia, y ciertamente, ese es un recurso más que dudoso para lograr el beneplácito del espectador (aunque lo mismo pasaba con el Gordo Cabrón en Autin Powers 2 y ese por lo visto hizo gracia, así que repito, lo mismo soy yo).
El resto de teóricos momentos de humor los protagonizan juegos de palabras que, si bien es cierto que son mucho mejores que los antes citados del cacapedoculopis, no son ninguna maravilla sobrepasando a duras penas la barrera de la simple curiosidad, y lo más seguro es que se acaben perdiendo con el doblaje por lo que ni por esas podrá librarse el dichoso gurú del total hundimiento.
Para rematar la faena, todo ello está mezclado aquí y allá con alusiones a la famosa trilogía de Powers, teniendo como mayor exponente la actuación de Verne Troyer (Mini Yo), el malencarado entrenador del equipo de hockey y centro de un buen puñado de gags relacionados con su tamaño (ja je ji, ¿en serio no hay nada mejor que ofrecer?), que sin embargo vuelve a ganarle la partida a Myers convirtiéndose en lo ¿mejor? de la película.
Y es que este último, por más que se esconda tras frondosas barbas y melenas, se convierte en lo peorcito del film, tan irritante como de costumbre y agotando al público con sus infinitas muecas y sonrisitas al más puro estilo Eddie Murphy (quien por cierto, también está a punto de regresar a la gran pantalla con Atrapado en un pirado…).
Pero todo hay que decirlo, y si me apuran, debo reconocer que he llegado a sonreír con un gag o dos, principalmente aquellos en los que un hilarante Ben Kingsley hace su aparición estelar como maestro gurú. Del resto, solo merece ser destacada una brevísima parodia del cine de Bollywood (música chirriante incluída) que es el único momento en que la película parece adoptar algo de personalidad (por poca que sea). Por este motivo y por la presencia de la despampanante (que sea buena actriz o no me da absolutamente lo mismo) Jessica Alba, se lleva la puntuación que se lleva, en vez del cero más absoluto que es el que se merece.
Trailer de El gurú del buen rollo
Valoración de La Casa
En pocas palabras
¿Y qué esperábamos? Un desastre de principio a fin, nociva para un usuario a quien destruye gratuitamente neuronas sin darle nada a cambio.
Querido Capitán,
has recibido un Premio al Esfuerzo Personal en mi blog, puedes recogerlo cuando quieras! Enhorabuena :)
Saludos
PD. menuda bazofia de película la que comentas, ¿no? A mi Austin Powers me da rabia pero tiene gags buenos!
Pfff… Qué pereza…
¿Ya está el DVD, o te has chupado un screener?
marchelo, jejeje, gracias, mañana o así me pasaré por ahí a recogerlo, qué honor! ;)
goethe, dvdscreener, que de vez en cuando se ponía en blanco y negro, pero por lo demás calidad más que aceptable.
a los dos: película de mierda, mierda, mierdaca! vamos, que no perdáis el tiempo!
Mierdaca es poco…..dure 27 min y me parecio demasiado….
pero no dura 26? ah, no, ya… es lo que debería haber durado (y son 26 minutos más de los que recuerdo de esta mierda)