Crítica de La isla de las mentiras
En el año 1921, un navío se hundió frente a la costa de la isla Sálvora. Murió mucha gente en lo que se conoce como el Titanic gallego, pero algunos afortunados fueron rescatados por un grupo de mujeres que se contaban entre los pocos habitantes de la isla que se habían quedado, mientras el grueso de la población celebraba la navidad en la península. Estos son los acontecimientos reales alrededor de los que La isla de las mentiras enarbola un thriller digno, en esencia, de Agatha Christie. Coincidencias extrañas, gente que algo oculta, y un detective (periodista en este caso, Darío Grandinetti) que intenta nada a contracorriente: y es que puede que las mujeres que han salvado a tantas personas no sean tan angelicales como la gente cree.
Esta sería a grandes rasgos, la ambiciosa trama de una no menos ambiciosa película, en todos los sentidos, y que supone el debut tras la cámara de Paula Cons. Ya de entrada, se demuestra exigente consigo misma con una puesta en escena espectacular: fotografía (exquisita la labor de Aitor Mantxola), vestuarios… La isla de las mentiras no baja de la excelencia a nivel formal, hasta el punto de maquillar con atino sus dificultades tecnológicas a la hora de recrear la escena del naufragio. Pero sobre todo porque la propia Cons se descubre como una cineasta con gusto y personalidad: elegancia en cada plano e imposición de unos tempos que nada tienen que ver con los ritmos del cine comercial, ni ganas.
El reparto también merece un aparte. Si la directora apuesta por juegos de miradas y silencios en planos que se alargan unas décimas más de lo esperado para generar cierto estado de incomodidad, Nerea Barros, Victoria Teijeiro y compañía responden con perfección puntillosa, haciendo que el reparto coral suponga el broche definitivo de este batiburrillo entre costumbrismo y cluedo. Entre lo heroico y lo inenarrable.
Lástima pues, que a la La isla de las mentiras tanta pretensión se le acabe yendo de las manos, flaqueando en el pilar más importante de los que sustentan la película: el guion. Escrito por Paula Cons y Luis Marías, se pasa de frenada con una pomposidad que le resta buena parte del impacto. Frases forzadas, situaciones redundantes… los tempos lentos, la sobriedad y el ceño fruncido se confunden en no pocas ocasiones con el mero aburrimiento en una película que en ocasiones parece bien encantada de conocerse, o bien incapaz de retomar el rumbo. Y vaya si pasa factura. Tanto, como para que lo que tenía que ser una alegría para el cine español, acabe en un por los pelos.
Pero quedémonos con lo positivo: tras La isla de las mentiras se encuentra una voz que suena con fuerza y tiene plenas posibilidades de asentarse. Quizá Paula Cons haya pecado de exceso en su primera película, pero nadie puede negar que lo tiene todo de cara para acabar siendo un nombre de esos que marquen el devenir de nuestro cine.
Lee la crítica mientras escuchas Sálvora, canción principal de La isla de las mentiras
Datos de La isla de las mentiras
- Su estreno tiene lugar en Filmin el 24 de julio de 2020.
- El título alternativo de la película es El Santa Isabel, y se puede encontrar algún que otro material promocional con este título.
- Ha sido seleccionada para participar en el festival de cine de Shanghai.
- Al navío Santa Isabel se lo conoce como el Titanic gallego. Murieron 213 personas, 55 se salvaron.
Valoración de La Casa
En pocas palabras
Película impecable a nivel formal pero cuyo guion se pasa de frenada, mostrando mayores ambiciones que resultados. Fuerza demasiado la máquina restando enteros a un drama sobrio que hubiera podido calar muy hondo.