Crítica de Ratatouille
Tras la parcialmente decepcionante y completamente infravalorada «Cars», lo nuevo de Pixar provocaba más dudas que alegrías debido a los numerosos problemas que el estudio tuvo con su mecenas, Walt Disney Pictures, y que llegaron a encauzarse de nuevo a última hora, cuando ya se llegaba a rumorear que esta última se había hecho con la producción del proyecto, para desesperación de todos los fans de Nemo y compañía. Afortunadamente todo salió según lo debido, pero aún así, el trailer exhibido en cines no hacía si no sembrar aún más dudas sobre el resultado final de la película. Desconfiados, ¡qué ilusos fuimos!
Sin duda alguna, «Ratatouille» no solo es la mejor película de animación del año, si no una de las mejores películas a secas de todo el 2007, y con permiso de «Los Increíbles», la mejor de los estudios Pixar.Una rata llamada Remy sueña con convertirse en un gran chef francés a pesar de la oposición de su familia y del problema evidente que supone ser una rata en una profesión que detesta a los roedores. El destino lleva a Remy a las alcantarillas de París, pero su situación no podría ser mejor, ya que se encuentra justo debajo de un restaurante que se ha hecho famoso gracias a Auguste Gusteau, una estrella de la cuisine. A pesar del peligro que representa ser un visitante poco común (y desde luego nada deseado) en los fogones de un exquisito restaurante francés, la pasión de Remy por la cocina pone patas arriba el mundo culinario parisino.
Sinceramente, no sé ni por dónde empezar a enumerar las genialidades de esta película, presentes prácticamente en cada uno de sus fotogramas.
Antes que nada, es necesario hacer hincapié en el potencial gráfico/técnico que despliega Pixar, demostrando una vez más que todos sus rivales, sin excepción, están a años luz de alcanzarles.
Paris está recreada de manera mágica, onírica. Jamás la ciudad de las luces había sido tan brillante. Y las ratas, protagonistas de la película, están tan cuidadas y presentan un nivel de detalle que de no ser por la caracterización voluntariamente cómica, difícilmente (y lo digo en serio) podrían distinguirse de una filmación real. Cada uno de sus movimientos son de un realismo irrefutable, y su pelaje resulta realista incluso cuando reacciona a los elementos naturales (véase cada vez que una de las ratas se moja). Por su parte, los humanos, caricaturizados tal vez en exceso, corren la misma suerte, pues visten ropajes que se mojan, arrugan, manchan y estiran con una plasticidad pasmosa.
Pero es que lo realmente magnífico de «Ratatouille» es que dichas proezas quedan completamente en segundo plano, siendo el verdadero punto fuerte de la película su guión. La historia transcurre de manera refinada, plácida, buscando una conexión con el espectador de manera completamente distinta a lo que una película de animación suele hacer, ya que huye del chiste fácil, el resbalón, el amigo torpe, en pro de una sonrisa de complicidad venida de otros factores, como la profundidad de los personajes o la ternura que desprenden. Siguen habiendo gags y bromas de todo tipo, evidentemente, pero esta vez su corte es mucho más diferente. Y es que sin duda estamos ante la película más madura y adulta de los estudios Pixar.
Todo eso no quiere decir que «Ratatouille» reniegue de escenas de acción, ya que constantemente se intercalan situaciones de quietud y progreso en la interrelación de los protagonistas con trepidantes persecuciones y fugas, hasta llegar a un clímax final sumamente bien logrado.
Pero esta nueva genialidad de Brad Bird no solo resulta exquisita a la vista (y por tanto al gusto y al olfato, y es que alguno de los manjares está tan bien logrado que casi puede olerse y saborearse), si no también al oído. La banda sonora corre a cargo de Michale Giacchino, que tras demostrar su enorme talento en «Alias», «Perdidos», o «Misión: Imposible 3» de nuevo se consolida como uno de los mejores compositores del momento, con un sinfín de melodías que acompañan a la película sin querer tener mayor protagonismo que la misma, pero sí siendo un acompañamiento de auténtico lujo.
Vaya, que por estos y tantos otros motivos, «Ratatouille» es una película inmensa. La más perfecta fusión de cine para adultos y niños hasta el momento, cargada de ternura, buen humor, e inteligencia (algo que muchas distribuidoras parecen olvidar en este tipo de películas), y envuelta con un embalaje exquisito en el que nada sobra, nada falla, todo funciona como en el mejor de los sueños.
Absolutamente deliciosa.
10/10
Totalmente de acuerdo. De las mejores del año. Saludos.
amén!
Me la vi hace unos dias despues de leerte ^^. volvi a ser una chiquilla mientras dejaba que mis ojos vagaran por la pantalla del televisor (lamentablemente no la pude ver en la calidad que ofrece la sala de cine). me rei y disfrute cada una de las ocurrencias de los personajes como no lo habia hecho con tantas de las peliculas animadas que he visto. la historia simplemente me atrapo y estoy completamente de acuerdo con esa puntuacion :)
jejeje, me alegro! Aunque esa puntuación es una jodienda, ya que ahora no puedo estar poniendo un 10 tras otro a todas las pelis de Pixar (mi intención sería esa!)
jejeje yo me vería muy tentada a ponerle 10 a la mayoría de las películas de pixar. son muy buenos en lo que hacen. las mejores animaciones que he visto son de ellos :)(menos mal no me dedico a escribir criticas, no seria muy imparcial que digamos :P XD)
totalmente de acuerdo. Aunque… has visto Cómo entrenar a tu dragón?
sip. es bastante buena. creo que DreamWorks atino bastante con ella. :) me atrevería a decir que es de las mejores animaciones que ha hecho ese estudio.
Los 10 están para utilizarlos y esta se lo merece. Si encuentras otras que te guste más, le pones un 11 y te quedas tal cual.
Lena, la mejor, y con diferencia, jeje!
marc, dí que sí. Lo que me pregunto es dónde iría a parar mi credibilidad si empezara a valorar películas con más de 10. Porque si empiezo por 11s, luego llega Cars 2, es la rehoxtia, y toca poner 12, y luego la siguiente… etc….
¿tú credibili… qué? ja,ja. no te preocupes hombre, que seguro que no tienes de eso.
Juas, tío, es como si me conocieras de toda la vida XD