Crítica de Saint Maud
A24 está haciendo algo muy bien en el páramo del género de terror, tan denostado por culpa de ciertas producciones Blumhouse y condenado a sagas de calidad decreciente en salas comerciales. Porque es una valentía rodar algo como Saint Maud y estrenarlo en pantalla grande, justo el día de Navidad en España. Ahí, provocando.
El filme cuenta la historia de Maud, una joven enfermera con un pasado traumático, y más religiosa que el cura ese de Valdepeñas que quiere que sus feligreses le paguen las reparaciones en la Iglesia, que comienza a trabajar cuidando a una enferma terminal de cáncer, una ex bailarina con malos hábitos y de mal vivir, pecadora como ella sola. Maud, más maja que las pesetas, se verá en la obligación de sacarla de ese desnortado camino y ayudarla para que Dios la acepte en sus dominios.
Es este un largometraje construido a fuego lento, que en muchos momentos recuerda a la reciente The Lodge (2019), ya que incluye escasos jump-scares, cada vez más manidos e irritantes. Aquí el terror se fabrica de otro modo, a través de la perversa relación entre las dos mujeres (estupendas ambas, sobre todo la joven Morfydd Clark), generando una atmósfera adecuada para un final brutal.
En Saint Maud se nos habla de religión, miedo a la muerte, enfermedad, locura, desde un prisma acertado y que también puede remitirnos a la mítica Carrie de Brian De Palma y Stephen King. Los que acudan a ella, que no esperen sustos a lo Expediente Warren, pero sí una experiencia intensa, sencilla y efectiva, más cerca de los experimentos de Ari Aster.
Un filme de terror diferente, alejado de los circuitos comerciales, pero valiente en sus planteamientos y en ciertas imágenes, que harían que Rouco Varela se quisiera arrancar los ojos. Le auguramos un prometedor futuro en el género a su directora, Rose Glass.
Trailer de Saint Maud
Reseña de Saint Maud
En pocas palabras
Cine de terror que huye de jump scares en busca de formas más sutiles con las que acabar, igualmente, acojonando al personal. Y vaya si lo consigue.