ultimátum a la tierra 1951

Recordando Ultimátum a la Tierra (1951)

En nuestro afán por hacer resucitar el cine de ciencia-ficción de los años 50, la pasada noche los hermanos mutantes y yo organizamos una nueva reunión en mi casa, y esta vez, la película escogida fue The Day the Earth Stood Still (1951), o lo que es lo mismo en esas traducciones tan molonas que se hacían en la época, Ultimátum a la Tierra.Una nave espacial aterriza en Washington D.C. causando gran conmoción. De ella, salen un extraterrestre de nombre Klaatu y un robot de terribles poderes, Gort. Afirman venir en son de paz, alegando que su llegada a la Tierra tiene como objetivo reunir a los representantes de todos los países y así poder proclamar un comunicado, una advertencia, de parte del resto del Universo. Pero las cosas se complican, por lo que el alienígena decide mezclarse entre los humanos para ver si realmente merece la pena llevar a cabo su misión…

Dirigida por Robert Wise (West Side Story), la película es otra sorprendente muestra de lo que puede dar de sí el género de la ciencia-ficción. En este caso, la escasez de medios no daba pié a demasiados alardes tecnológicos, por lo que se opta por un film de sobria factura, casi intimista, y con un guión bien elaborado tratando de abordar temas de la actualidad del momento (tales como la guerra fría, o la carrera por el espacio) e incluso adquiriendo una posición ideológica a respecto. Solo hace falta tomar como ejemplo el hecho de que el Universo entero esté en paz, pues es el único modo viable de evolucionar conjunta y correctamente. Resulta sin embargo entrañable ver cómo estos se abrazan a la enorme inocencia y desconocimiento con los que, en cambio, se nos presentan temas como las formas de vida extraterrestres, o los robots súper avanzados.

Pero no son estos los únicos puntos a favor de «Ultimátum a la Tierra». Y es que aunque esté horriblemente mal hecho, pues el metal indestructible con el que esta hecho resultan ser pantalones de espuma, el robot Gort es otro de esos autómatas históricos, con reminiscencias al inolvidable Robby de Planeta prohibido (Fred McLeod Wilcox, 1956), que merece una especial mención. Su temible poder (de lo más molón) consta de un rayo láser que lanza cuando levanta una visera colocada en lo que serían sus ojos, y que tiene la capacidad de hacer desaparecer cualquier tipo de arma. Y sin embargo, es tan fiel a su «amo» que jamás lo usará a no ser que éste se lo pida.

(¡No leáis el siguiente párrafo si no queréis saber demasiados detalles de la película! Vaya, que es un poco spoiler) Según el marciano, de esta clase de robots hay a montones rondando por el espacio, vigilando a todas las especies vivas… Y aquí entramos en el tema más conflictivo del film . El mensaje que debe dar Klaatu a la humanidad, como he dicho, es una advertencia, una amenaza: si la humanidad sigue usando tecnología nuclear para desarrollar nuevas armas, antes o después acabará desestabilizando la paz universal, por lo que los demás planetas se verán obligados a intervenir enviando robots como Gort a la Tierra para destruirla. Como se puede ver, es un discurso algo ambiguo, puesto que se trata de conseguir la paz a través de la violencia, mantener la libertad de vida a base de amenazas, y por ello muchos de los que la ven bajo un punto de vista actual y «comprometido» la critican por ser algo nazi en su fondo. (Fin del spoiler)

Lo cierto es que yo la vi sin prejuicios, pensando que en el tema recién tratado la mentalidad de aquella época era aún muy inocente y tal vez no veían las lecturas que se pueden apreciar ahora (también es cierto que puede que sea algo ingenua mi postura). Así, disfruté con una entretenidísima película (solo hay un bajón de ritmo en la parte central, en que se hace algo monótona) muy original, que sin llegar a ser tan impactante como la de McLeod, es igual de inolvidable. No se la pierdan.

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En diciembre de 2006 me dio por arrancar mi vida online por vía de un blog: lacasadeloshorrores. Empezó como blog de cine de terror, pero poco a poco se fue abriendo a otros géneros, formatos y autores. Más de una década después, por aquí seguimos, porque al final, ver películas y series es lo que mejor sé hacer (jeh) y me gusta hablar de ello. Como normalmente se tiende a hablar más de fútbol o de prensa rosa, necesito mantener en activo esta web para seguir dando rienda suelta a mis opiniones. Esperando recibir feedback, claro. Una película: Jurassic Park Una serie: Perdidos

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Comentarios

  1. A mí también me gustó!

  2. Mantener la paz (social) a traves de la violencia (o la amenaza de actuar violentamente), no es fascista, sino que es la manera como estan montadas todas las sociedades… O no?

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